Elaboración de salsa de tomate: formulación y proceso para una deliciosa salsa casera

Elaboración de salsa de tomate: formulación y proceso para una deliciosa salsa casera

La salsa de tomate es un condimento versátil y sabroso que se utiliza en una amplia variedad de platos, desde pastas y pizzas hasta guisos y salsas para mojar. En este artículo, te guiaremos a través del proceso detallado para fabricar salsa de tomate casera, desde la selección de los tomates adecuados hasta el envasado final. Acompáñanos en este viaje culinario y aprende a crear tu propia salsa de tomate para deleitar a tu familia y amigos.

1-Selección de ingredientes:

La calidad de los ingredientes es fundamental para obtener una salsa de tomate de calidad. Aquí se presenta la formulación básica de ingredientes para una salsa de tomate casera:

1- 2 kilogramos de tomates maduros y jugosos

2-1 cebolla grande, picada finamente

3- 2 dientes de ajo, picados

4- 2 cucharadas de aceite de oliva

5- Sal y pimienta al gusto

6- Hierbas y especias opcionales (orégano, albahaca, tomillo, etc.)

2-Preparación de los tomates:

a-Lavar los tomates y quitarles los tallos.

b-Escaldar los tomates en agua hirviendo durante unos segundos y luego sumergirlos en un recipiente con agua helada. Esto ayudará a pelarlos fácilmente. 

c-Pelar los tomates y cortarlos en trozos pequeños. Retirar las semillas si se prefiere una salsa menos líquida.

3-Proceso de cocción:

a-En una olla grande, calentar el aceite de oliva a fuego medio. Agregar la cebolla picada y el ajo, y cocinar hasta que estén tiernos y ligeramente dorados. 

b-Añadir los tomates cortados a la olla y mezclar bien con la cebolla y el ajo. Cocinar a fuego medio-alto hasta que los tomates se ablanden y comiencen a soltar su jugo.

c-Reducir el fuego a medio-bajo y cocinar la mezcla a fuego lento durante aproximadamente 1 hora, removiendo ocasionalmente para evitar que se pegue en el fondo de la olla.

d-Si se desea una textura más suave, utilizar una batidora de mano o un procesador de alimentos para triturar los tomates cocidos hasta obtener la consistencia deseada.

e-Agregar sal, pimienta y las hierbas y especias opcionales al gusto. Continuar cocinando a fuego lento durante otros 15-30 minutos para que los sabores se mezclen y la salsa se espese.

4-Envasado:

a-Mientras la salsa de tomate aún esté caliente, verter en frascos de vidrio esterilizados y secos, dejando un espacio libre en la parte superior.

b-Cerrar herméticamente los frascos con las tapas esterilizadas.

c-Colocar los frascos en una olla grande con agua caliente, asegurándose de que estén completamente sumergidos. Llevar el agua a ebullición y cocinar durante 15-20 minutos para asegurar un sellado adecuado de los frascos.

5-Almacenamiento y consumo:

a-Etiquetar los frascos de salsa de tomate con la fecha de elaboración.

b-Almacenar los frascos en un lugar fresco y oscuro, como una despensa, para preservar su calidad. La salsa de tomate casera puede conservarse hasta 1 año si se almacena adecuadamente.

c-Una vez abierto un frasco, refrigerarlo y consumirlo dentro de un plazo de 1-2 semanas.

Conclusiones:

La fabricación de salsa de tomate casera es una experiencia gratificante que te permite disfrutar de los sabores frescos y auténticos de los tomates. Con ingredientes simples y un proceso de cocción cuidadoso, puedes crear una salsa de tomate deliciosa y versátil que elevará tus platos caseros. Además, al hacer tu propia salsa de tomate, tienes el control total sobre los ingredientes y puedes ajustar el sabor según tus preferencias personales. Ya sea que la utilices en pastas, pizzas o como base para otras salsas, la salsa de tomate casera agrega un toque especial a tus comidas. Anímate a probar esta receta y descubre el placer de hacer tu propia salsa de tomate desde cero. ¡Buen provecho!